II Samuel  7, 1-3

La promesa dinástica de Natán

(1 Cr 17:1-27)

Una vez que David se hubo instalado en su casa y el Señor le concedió un respiro frente a todos sus enemigos de los alrededores, dijo el rey al profeta Natán * : — Mira, yo estoy viviendo en una casa de cedro *, mientras que el Arca de Dios está en una tienda º. º Natán le respondió: — Haz lo que estás pensando, que el Señor está contigo.
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