Eclesiastés 3, 2-8

Hay un tiempo para nacer y un tiempo para morir; un tiempo para plantar y un tiempo para arrancar lo plantado. Hay un tiempo para matar y un tiempo para curar; un tiempo para destruir y un tiempo para construir. Hay un tiempo para llorar y un tiempo para reír; un tiempo para hacer duelo y un tiempo para bailar. Hay un tiempo para arrojar piedras y un tiempo para recogerlas; un tiempo para abrazarse y un tiempo para separarse. Hay un tiempo para buscar y un tiempo para perder; un tiempo para guardar y un tiempo para botar. Hay un tiempo para rasgar y un tiempo para coser; un tiempo para callar y un tiempo para hablar. Hay un tiempo para amar y un tiempo para odiar; un tiempo de guerra y un tiempo de paz.
Ver contexto