Salmos 102, 3
“
no ocultes de mí tu rostro
el día de la angustia;
tiende hacia mí tu oído,
¡responde presto el día en que te invoco!
”
el día de la angustia;
tiende hacia mí tu oído,
¡responde presto el día en que te invoco!
”
Salmos 102, 3