Jeremías  8, 4-7

Les dirás: Esto dice Yahvé: ¿No se levantan los que caen?; y si uno se extravía, ¿no sabe volver? Pues ¿por qué se extravía este pueblo, y Jerusalén apostata de continuo? Se aferran a la mentira, rehúsan convertirse. He escuchado atentamente: sus palabras no son veraces. Nadie deplora su maldad ni se pregunta: «¿Qué hice?» Todos se extravían en sus correrías, como caballo desbocado en la batalla. Hasta la cigüeña reconoce en el cielo su estación, y la tórtola, la golondrina o la grulla guardan el tiempo de sus migraciones. Pero mi pueblo ignora el derecho de Yahvé.
Ver contexto