Hebreos 10, 17-20

Me olvidaré de sus pecados y delitos. Ahora bien, si son perdonados, ya no hace falta ofrenda por el pecado.

Exhortación

Por la sangre de Jesús, hermanos, tenemos libre acceso al santuario; por el camino nuevo y vivo que inauguró para nosotros a través del velo del templo, a saber, de su cuerpo.
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