II Crónicas  10, 15-17

No escuchó el rey al pueblo, porque era cosa de Dios, para que se cumpliera la palabra que había dicho Yahvé por medio de Ajías, silonita, a Jeroboam, hijo de Nabat. Viendo todo Israel que no los había escuchado el rey, respondió el pueblo al rey diciendo: “¿Qué tenemos que ver nosotros con David? No tenemos heredad con el hijo de Isaí. IA tus tiendas, Israel! Mira tú ahora por tu casa, David.” Y todo Israel se fue a sus estancias. Reinó Roboam sobre los hijos de Israel que habitaban en las ciudades de Judá.
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