Juan  1, 9-13

La Palabra era la luz verdadera
que ilumina a todo hombre,
viniendo a este mundo. En el mundo estaba,
y el mundo fue hecho por ella,
y el mundo no la conoció. Vino a los suyos,
y los suyos no la recibieron. Pero a todos los que la recibieron
les dio poder de hacerse hijos de Dios,
a los que creen en su nombre; los cuales no nacieron de sangre,
ni de deseo de carne,
ni de deseo de hombre
sino que nacieron de Dios.
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