Jeremías  10, 21-23

Los pastores están embrutecidos,
no consultan al Señor,
por eso no obran con acierto,
y los rebaños se desperdigan. Escuchen un mensaje: Ya llega
con gran estruendo del país del norte,
para convertir los poblados de Judá
en desolación,
en guarida de chacales. Ya lo sé, Señor, que el hombre
no es dueño de sus caminos,
que nadie puede establecer
su propio curso.
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