II Crónicas  6, 3-5

Luego el rey, volviéndose a toda la asamblea, la bendijo estando toda en pie;" y prosiguió: “Bendito Yahvé, Dios de Israel, que ha cumplido lo que por su boca prometió a David, mi padre, diciendo: Desde que saqué de Egipto a mi pueblo, ninguna ciudad elegí de las tribus de Israel para edificar casa donde estuviese mi nombre, ni elegí varón que fuese príncipe de mi pueblo, Israel;"
Ver contexto