Isaías 57, 7-8
“
Sobre un monte alto, bien alto, pusiste tu cama; también subiste allí para sacrificar." Detrás de la puerta y el umbral pusiste tu distintivo, pues, lejos de mí, te descubriste y subiste a tu lecho, lo ensanchaste y te prostituíste con aquellos cuyo comercio deseaste, compartiendo su lecho. Contemplaste la estela7, ”