Levítico 6, 12-20

Yahvé habló a Moisés, diciendo: “He aquí la ofrenda que han de hacer Aarón y sus hijos el día de su unción: un décimo de “efah” de flor de harina, como oblación perpetua, la mitad por la mañana y la mitad por la tarde. Se freirá en la sartén, amasada con aceite, y la ofrecerá caliente en suave olor a Yahvé. Es la ley perpetua ante Yahvé; toda se quemará." Toda oblación de sacerdote se quemará toda, no se comerá.” Yahvé habló a Moisés, diciendo: “Di a Aarón y a sus hijos: Esta es la ley del sacrificio por el pecado. Se inmolará donde se inmola ante Yahvé el holocausto. Es cosa santísima. El sacerdote que la ofrece, la comerá en lugar santo, en el atrio del tabernáculo de la reunión. Quienquiera que tocare la carne, se santificará. Si la sangre mojara alguna vestidura, será lavada en lugar santo.
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