Lucas 18, 33-38

y después de haberle azotado, le quitarán la vida, y al tercer día resucitará. Pero ellos no entendían nada de esto; eran cosas ininteligibles para ellos, no entendían lo que les decía." Acercándose a Jericó, estaba un ciego sentado junto al camino pidiendo limosna. Oyendo a la muchedumbre que pasaba, preguntó qué era aquello. Lc contestaron que era Jesús Nazareno que pasaba. El se puso a gritar, diciendo: Jesús, Hijo de David, ten piedad de mí.
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