Lucas 19, 1-8

Entrando, atravesó Jericó. Había allí un hombre llamado Zaqueo, jefe de publícanos y rico. Hacía por ver a Jesús, pero a causa de la muchedumbre no podía, porque era de poca estatura. Corriendo adelante, se subió a un sicómoro para verle, pues había de pasar por allí. Cuando llegó a aquel sitio, levantó los ojos Jesús y le dijo: Zaqueo, baja pronto, porque hoy me hospedaré en tu casa. El bajó a toda prisa y le recibió con alegría. Viéndolo, todos murmuraban de que hubiera entrado a alojarse en casa de un pecador. Zaqueo, en pie, dijo al Señor: Señor, doy la mitad de mis bienes a los pobres, y si a alguien he defraudado en algo, le devuelvo el cuádruplo.
Ver contexto