II Crónicas  10 Nueva Versión Internacional (1999) | 19 versitos |
1 Roboán fue a Siquén porque todos los israelitas se habían reunido allí para proclamarlo rey.
2 De esto se enteró Jeroboán hijo de Nabat, así que volvió de Egipto, que es adonde había huido del rey Salomón.
3 Cuando lo mandaron a buscar, él y todo Israel fueron a ver a Roboán y le dijeron:
4 —Su padre nos impuso un yugo pesado. Alívienos usted ahora el duro trabajo y el pesado yugo que él nos echó encima; así serviremos a Su Majestad.
5 —Váyanse por ahora —respondió Roboán—, pero vuelvan a verme dentro de tres días. Cuando el pueblo se fue,
6 el rey Roboán consultó con los ancianos que en vida de su padre Salomón habían estado a su servicio. —¿Qué me aconsejan ustedes que le responda a este pueblo? —preguntó.
7 Ellos respondieron: —Si Su Majestad trata con bondad a este pueblo, y condesciende con ellos y les responde con amabilidad, ellos le servirán para siempre.
8 Pero Roboán rechazó el consejo que le dieron los ancianos, y consultó más bien con los jóvenes que se habían criado con él y que estaban a su servicio.
9 —¿Ustedes qué me aconsejan? —les preguntó—. ¿Cómo debo responderle a este pueblo que me dice: “Alívienos el yugo que su padre nos echó encima” ?
10 Aquellos jóvenes, que se habían criado con él, le contestaron: —El pueblo le ha dicho a Su Majestad: “Su padre nos impuso un yugo pesado; hágalo usted más ligero.” Pues bien, respóndales de este modo: “Mi dedo meñique es más grueso que la cintura de mi padre.
11 Si él les impuso un yugo pesado, ¡yo les aumentaré la carga! Y si él los castigaba a ustedes con una vara, ¡yo lo haré con un látigo!”[a]
12 Al tercer día, en la fecha que el rey Roboán había indicado, Jeroboán regresó con todo el pueblo para presentarse ante él.
13 Pero el rey Roboán les respondió con brusquedad: rechazó el consejo de los ancianos,
14 y siguió más bien el de los jóvenes. Les dijo: «Si mi padre les impuso[b] un yugo pesado; ¡yo les aumentaré la carga! Si él los castigaba a ustedes con una vara, ¡yo lo haré con un látigo!»
15 Y como el rey no escuchó al pueblo, las cosas tomaron este rumbo por voluntad de Dios. Así se cumplió la palabra que el SEÑOR le había comunicado a Jeroboán hijo de Nabat por medio de Ahías el silonita.
16 Cuando se dieron cuenta de que el rey[c] no iba a hacerles caso, todos los israelitas exclamaron a una: «¡Pueblo de Israel, todos a sus casas! ¡Y tú, David, ocúpate de los tuyos! ¿Qué parte tenemos con David? ¿Qué herencia tenemos con el hijo de Isaí?» Así que se fueron, cada uno a su casa.
17 Sin embargo, Roboán siguió reinando sobre los israelitas que vivían en las ciudades de Judá.
18 Más tarde, el rey Roboán envió a Adonirán[d] para que supervisara el trabajo forzado, pero los israelitas lo mataron a pedradas. ¡A duras penas logró el rey subir a su carro y escapar a Jerusalén!
19 Desde entonces Israel ha estado en rebelión contra la familia de David.

Patrocinio

 
 

Introducción a II Crónicas 

No hay comentario

Fuente: Nueva Versión Internacional (SBI, 1999)

Patrocinio

Notas

II Crónicas  10,11

[a] con una vara … con un látigo. Lit. con azotes … con escorpiones; también en v. 2Cr 10:14.


II Crónicas  10,14

[b] Si mi padre les impuso (mss. hebreos y versiones antiguas); Yo les impondré (TM).


II Crónicas  10,16

[c] Cuando se dieron cuenta de que el rey (mss. hebreos y versiones antiguas); Como el rey (TM).


II Crónicas  10,18

[d] Adonirán. Lit. Adorán (variante de este nombre).