(SALMO 98)
No hay otro Dios
Pueblos de toda la tierra:
¡pónganse a temblar!
¡Dios es nuestro rey,
y reina entre los querubines!
está por encima de Jerusalén
y de todos los pueblos.
¡No hay otro Dios!
tú eres un rey poderoso
que ama la justicia;
has establecido la igualdad;
has actuado en Israel
con rectitud y justicia.
¡Inclínense a adorarlo!
Samuel estuvo a su servicio.
Todos ellos llamaron a Dios,
y él los escuchó;
y ellos cumplieron fielmente
las órdenes que les dio.
tú atendiste a su llamado,
y aunque castigaste su maldad
también los perdonaste.
¡Adórenlo en su propio templo!
No hay comentario