1 La muerte de la gente buena Isaías dijo: «Muere la gente honrada y a nadie le llama la atención; desaparece la gente buena y nadie entiende que la muerte los libra de sus males. |
2 Ellos me obedecieron en todo y ahora descansan en paz». |
3 Contra el culto de los ídolos Dios dijo: «Y ustedes, gente infiel, que adora a los ídolos, acérquense y presten atención. |
4 ¿De quién se burlan ustedes? ¿A quién le sacan la lengua? Ustedes son hijos del pecado; son gente mentirosa. |
5 Debajo de los robles y de todo árbol verde tienen relaciones sexuales para adorar a dioses falsos; junto a los arroyos y en las cuevas de las rocas sacrifican niños en su honor. |
6 »Ustedes, los israelitas, prefieren adorar las piedras lisas del arroyo; a ellas les han llevado ofrendas de vino y de cereales. Y después de todo esto, ¿esperan verme contento? |
7 »Sobre un monte alto y empinado tendieron sus camas, y allí subieron a ofrecer sacrificios. |
8 Detrás de las puertas de sus casas colocaron sus dioses falsos, se olvidaron de mí, y los adoraron; hicieron pactos con otras naciones mientras adoraban a esos ídolos. |
9 »Van corriendo hacia el dios Mélec, llevando aceite y muchos perfumes; hasta buscan consejo de los espíritus de los muertos. |
10 Caminan y caminan para adorar a sus dioses, y parecen no cansarse. ¿Para qué tantas peregrinaciones, si todo eso es inútil? |
11 ¿Quiénes son esos dioses que tanto los asustan, para que me sean infieles y me olviden por completo? »Cuando ustedes no me adoraban, yo me quedaba callado y cerraba los ojos. |
12 Pero ahora voy a denunciar todo lo que están haciendo. Todas sus obras no les servirán de nada. |
13 Cuando griten pidiendo auxilio, esos ídolos no los ayudarán ni los librarán. El viento se los llevará; de un soplo desaparecerán. En cambio, el que se refugia en mí, heredará la tierra y vivirá en Jerusalén. Yo soy el Dios todopoderoso». |
14 Castigo y curación de Israel Entonces Dios dijo: «¡Abran paso, abran paso, preparen un camino llano, para que pase mi pueblo! |
15 Porque yo soy el Dios eterno y mi nombre es santo. Yo vivo en un lugar alto y sagrado, pero también estoy con los pobres y animo a los afligidos. |
16 »Pueblo mío, no siempre voy a acusarte, ni estaré enojado todo el tiempo. Yo mismo te hice, y no quiero que te desanimes. |
17 »Israel, a causa de tu pecado por un tiempo estuve enojado contigo; entonces te castigué y me alejé de ti. Pero ustedes los israelitas se pusieron muy caprichosos y se rebelaron contra mí. |
18 Yo he visto su desobediencia, pero les quitaré su rebeldía y les daré descanso. A todos los que están tristes |
19 los haré entonar este canto de acción de gracias: “¡Paz al que está lejos, paz al que está cerca! ¡Yo perdonaré a mi pueblo! |
20 Pero los malvados son como un mar agitado que no se puede calmar; sus olas arrastran barro y suciedad. |
21 ¡No pueden vivir en paz!” »Les juro que así es». |