Oseas  8 Sagrada Biblia (Conferencia Episcopal Española, 2011) | 14 versitos |
1 ° A tus labios la trompeta, | como un heraldo contra el templo del Señor, | porque han transgredido mi alianza | y se rebelaron contra mi ley.
2 Me invocan gritando: | «¡Dios de Israel, te conocemos!».
3 Israel ha rechazado el pacto; | el enemigo lo perseguirá.
4 Han constituido reyes, sin contar conmigo, | autoridades, y yo no sabía nada. | Con su plata y con su oro | se hicieron ídolos para establecer pactos.
5 ¡Tu becerro te ha rechazado, Samaría! | Mi ira se inflamó contra ellos. | ¿Hasta cuándo serán culpables
6 de la suerte de Israel? | ¡Un artesano lo ha hecho, | pero eso no es un Dios! | Sí, terminará hecho pedazos | el becerro de Samaría.
7 Puesto que siembran viento, | cosecharán tempestades; | «espiga sin brote no produce harina». | Tal vez la produzca, | pero la devorarán extranjeros.
8 Israel ha sido devorado. | Ahora están entre las naciones | como un objeto indeseable.
9 Cuando marcharon a Asiria, | Efraín, un asno desbandado, | se procuró amores.
10 Aunque los consiga entre las naciones, | ahora lo domestico. | Sufrirán dentro de poco los dolores de parto | por el tributo al rey de los señores.
11 Efraín multiplicó los altares de pecado, | y fueron para él altares de pecado.
12 Para él escribo todos mis preceptos, | son considerados cosa de otros.
13 ¡Sacrificios de carne asada! | Sacrificaron la carne y se la comieron. | El Señor no los acepta. | Tiene presente su perversión | y castiga sus pecados: | deberán retornar a Egipto.
14 Ha olvidado Israel a su Hacedor | y ha edificado palacios. | Judá multiplicó las ciudades fortificadas. | Pero yo pegaré fuego a sus ciudades, | y devorará sus fortalezas.

Patrocinio

 
 

Introducción a Oseas 

OSEAS

El libro de Oseas refleja la crisis política y religiosa que atravesaba el reino del Norte en la segunda mitad del siglo viii. Desde el punto de vista religioso, el libro tiene presente la confrontación entre Dios y Baal, cuyo culto estaba arraigado en el pueblo y en la monarquía e incluía la prostitución sagrada. Sus profecías ejercieron, sin duda, una influencia grande en los profetas y tradiciones religiosas posteriores: Jeremías, tradición deuteronomista, Ezequiel y Segundo Isaías.

Fuente: Sagrada Biblia (Conferencia Episcopal Española, 2011)

Patrocinio

Notas

Oseas  8,1-14*8 El profeta debe hablar contra el templo y contra su símbolo, el becerro (Ose 8:1 y Ose 8:5), porque las autoridades que lo administran (los sacerdotes) ejercen un influjo ilegítimo en la vida política del país, constituyendo autoridades y estableciendo pactos (Ose 8:4).