“
lo que le obliga a estar dividido. La mujer soltera, lo mismo que la doncella, se preocupa de las cosas del Señor*, de ser santa de cuerpo y de espíritu. Mas la casada se preocupa de las cosas del mundo y de cómo agradar a su marido. ”
7:34 Var.: 33 « ... de cómo agradar a su mujer. 34Y hay una diferencia entre la mujer casada y la virgen. La mujer no casada se preocupa de las cosas del Señor... ».