Genesis 19, 4-11

Aún no se habían acostado, cuando los habitantes de la ciudad de Sodoma se agolparon alrededor de la casa: jóvenes y ancianos, allí estaban todos sin excepción. Y gritaron a Lot: — ¿Dónde están los hombres que han entrado esta noche en tu casa? Hazlos salir fuera para que tengamos relaciones sexuales º con ellos. Lot salió a la puerta y, después de cerrarla detrás de sí, les dijo: — Hermanos míos, les ruego que no cometan tal maldad. Tengo dos hijas que aún son vírgenes; voy a traérlas para que hagan con ellas lo que quieran, pero no les hagan nada a estos hombres que están cobijados bajo mi techo º. Pero ellos le contestaron: — ¡Quítate de ahí! Este individuo que ni siquiera es de aquí quiere ahora dárselas de juez. ¡Pues vamos a tratarte peor que a ellos! Y empujándolo violentamente, trataron de echar abajo la puerta. Pero los visitantes º alargaron el brazo, metieron a Lot con ellos en la casa y cerraron la puerta, Y a toda aquella gente que estaba agolpada a la puerta de la casa dejaron ciega, desde el más joven al más anciano, de modo que no eran capaces de encontrar la puerta. º
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