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El fiador

Hijo mío, si has salido fiador de tu prójimo, si has cerrado un trato º con un extraño, si has empeñado tu palabra y has quedado obligado por lo dicho, º haz lo siguiente, hijo mío, para salir bien librado, pues has caído en manos de tu prójimo: Trágate el orgullo e importuna a tu prójimo; no te entregues al sueño ni te des un instante de reposo º; escapa cual gacela de la trampa, como ave de la red del cazador. ”