Salmos 18, 20-23

(21) El Señor me premia por mi buena conducta, me recompensa por la inocencia de mis manos, (22) porque he respetado los caminos del Señor, no he sido infiel a mi Dios; (23) tengo presentes todos tus mandatos, no me alejo de sus normas; (24) he sido recto con él, me he apartado del pecado.
Ver contexto