Exodo  12, 43-50

Yahvé dijo a Moisés y a Aarón: «Ésta es la ley de la Pascua* : Ningún extranjero la comerá. Los esclavos que hayas comprado podrán comerla, si antes los circuncidas. El forastero y el jornalero no la comerán. Ha de ser comida en una sola casa; no sacaréis fuera de casa nada de carne, ni le quebraréis ningún hueso. Toda la comunidad de Israel la celebrará. Si un emigrante que vive contigo* desea celebrar la Pascua de Yahvé, se circuncidará, y entonces podrá acercarse para celebrarla, pues será como los nativos; pero ningún incircunciso podrá comerla. Habrá una misma ley para el indígena y para el emigrante que vive con vosotros.» Todos los israelitas obraron así. Hicieron exactamente lo que Yahvé mandó a Moisés y a Aarón.
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