I Tesalonicenses 3, 5-7

Por eso también yo, no pudiendo aguantar ya más, le envié para tener noticias de vuestra fe, no fuera que el Tentador* os hubiera tentado y que nuestro trabajo quedara reducido a nada. Acaba de llegar de ahí Timoteo, que nos ha traído buenas noticias de vuestra fe y vuestra caridad. Dice además que seguís conservando buen recuerdo de nosotros y que deseáis vernos —como nosotros a vosotros—. Así que, hermanos, en medio de todas nuestras congojas y tribulaciones, hemos recibido de vosotros un gran consuelo, al tener noticias de vuestra fe.
Ver contexto