Isaías 49, 5-6

Ahora, pues, esto dice Yahvé, que me hizo siervo suyo ya desde el seno materno, para hacer que Jacob vuelva a él, y para que se le una* Israel —y yo era valioso a los ojos de Yahvé, mi Dios era mi fuerza—: «Poco es que seas mi siervo, para restaurar las tribus de Jacob y hacer volver lo que quede de Israel. Te voy a hacer luz de las gentes, para que mi salvación alcance hasta los confines de la tierra.»
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