Eclesiástico 14, 3-6
“
dichoso el hombre a quien no le reprocha la conciencia
ni ha perdido la esperanza.
Tacaño y generoso
El hombre mezquino no merece riquezas,
el hombre tacaño no se merece el oro; el que se priva a sí mismo reúne para otros,
de sus bienes disfrutará el extraño; el que es tacaño consigo, ¿con quién será generoso?;
ni él mismo disfruta de sus bienes; ”
ni ha perdido la esperanza.
Tacaño y generoso
El hombre mezquino no merece riquezas,el hombre tacaño no se merece el oro; el que se priva a sí mismo reúne para otros,
de sus bienes disfrutará el extraño; el que es tacaño consigo, ¿con quién será generoso?;
ni él mismo disfruta de sus bienes; ”