Daniel  7, 7

A continuación seguí observando en la visión nocturna, y de pronto vi una cuarta bestia, terrible, espantosa, extraordinariamente fuerte. Tenía enormes dientes de hierro; comía y trituraba, y aplastaba las sobras con sus patas. Era muy distinta de todas las bestias anteriores y tenía diez cuernos.
Ver contexto