Genesis 17, 1-5

Tenía Abram noventa y nueve años cuando se le apareció Yahvéh y le dijo: Yo soy ElSadday; anda en mi presencia y sé perfecto. Estableceré mi alianza entre tú y yo, y te multiplicaré grandemente. Abram cayó rostro en tierra, y Dios le habló, diciéndole: Por lo que a mí toca, éste es mi pacto contigo: serás padre de una muchedumbre de pueblos. No se te llamará más Abram, sino que Abraham será tu nombre, porque te he constituido padre de una multitud de pueblos.
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