Genesis 24, 15-18

Apenas había acabado de hablar, cuando salía Rebeca, hija de Betuel, el hijo de Milcá, la mujer de Najor, el hermano de Abrahán, con el cántaro al hombro. La muchacha era muy hermosa, una doncella que no había conocido varón. Bajó a la fuente, llenó el cántaro y subió. El criado corrió a su encuentro y le dijo: «Por favor, déjame beber un poco de agua de tu cántaro». Ella respondió: «Bebe, señor mío». Y enseguida bajó el cántaro al brazo y le dio de beber.
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