II Crónicas  6, 2-4

y yo he edificado una casa de morada para que El la habite para siempre.” Luego el rey, volviéndose a toda la asamblea, la bendijo estando toda en pie;" y prosiguió: “Bendito Yahvé, Dios de Israel, que ha cumplido lo que por su boca prometió a David, mi padre, diciendo:
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