II Macabeos 13, 20-24

Judas proveía de vituallas a los de dentro. Un cierto Rodoco, del ejército judío, descubrió al enemigo los secretos de la defensa. Fue buscado, cogido y encarcelado. Por segunda vez el rey entró en tratos con los de Betsur, y, hechas las paces, se retiró. Atacó a Judas, mas fue vencido. Pero, informado de que Filipo, quien había quedado por regente del rey, se había sublevado en Antioquía, quedó consternado. Luego pidió la paz a los judíos, jurándoles atender sus justas peticiones; y, reconciliado con ellos, ofreció sacrificios, honró el templo y ofreció dones." Al Macabeo le acogió muy bien, y nombró a Egemónidas general desde Tolemaida hasta la región de los guerrenios.
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