Deuteronomio  21, 7-9

y responderán: “No han derramado nuestras manos esta sangre ni lo han visto nuestros ojos;" expía a tu pueblo Israel, a quien redimiste, ¡oh Yahvé!, y no imputes la sangre inocente a tu pueblo Israel.” Y la sangre les será perdonada. Así quitarás de en medio de ti la sangre inocente y harás lo que es recto a los ojos de Yahvé.”
Ver contexto