Efesios  5, 8-14

Fuisteis algún tiempo tinieblas, pero ahora sois luz en el Señor; andad, pues, como hijos de la luz." El fruto de la luz es todo bondad, justicia y verdad. Buscad lo que es grato al Señor, sin comunicar en las obras vanas de las tinieblas, antes bien, estigmatizadlas;" pues lo que éstos hacen en secreto repugna decirlo;" y todas estas torpezas, una vez manifestadas por la luz, quedan al descubierto, y todo lo descubierto, luz es. Por lo cual dice: “Despierta tú que duermes, y levántate de entre los muertos, y te iluminará Cristo.”
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