Deuteronomio  11 Nueva Biblia de Jerusalén (Desclee, 1998) | 32 versitos |
1
La experiencia de Israel.
Amarás a Yahvé, tu Dios, y guardarás sus consignas, sus preceptos, normas y mandamientos, todos tus días.
2 Vosotros sabéis hoy (no vuestros hijos, que ni lo saben ni lo han visto) la lección de Yahvé vuestro Dios, su grandeza, su mano fuerte y su tenso brazo,
3 sus señales y sus hazañas, las que realizó en Egipto, contra el faraón rey de Egipto y contra todo su territorio;
4 lo que hizo con el ejército de Egipto, con sus caballos y sus carros, precipitando sobre ellos las aguas del mar de Suf cuando os perseguían, y aniquilándolos Yahvé, hasta el día de hoy;
5 lo que ha hecho por vosotros en el desierto hasta vuestra llegada a este lugar;
6 lo que hizo con Datán y Abirón, hijos de Eliab el rubenita, cuando la tierra abrió su boca y los tragó, con sus familias, sus tiendas y todos los que les seguían, en medio de todo Israel.
7 Pues habéis visto con vuestros propios ojos toda esta gran hazaña que ha hecho Yahvé.
8
Promesas y advertencias.
Guardaréis todos los mandamientos que yo os prescribo hoy, para que os hagáis fuertes y lleguéis a poseer la tierra a la que vais a pasar para tomarla en posesión,
9 y para que prolonguéis vuestros días en la tierra que Yahvé juró dar a vuestros padres y a su descendencia, tierra que mana leche y miel.
10 Porque la tierra en la que vas a entrar para tomar en posesión no es como el país de Egipto del que habéis salido, donde sembrabas tu semilla y luego regabas con ayuda de tu pie, como en un huerto de hortalizas.
11 Sino que la tierra a la que vais a pasar para tomarla en posesión es una tierra de montes y de valles, que bebe el agua de la lluvia del cielo;
12 una tierra de la que se cuida Yahvé tu Dios; los ojos de Yahvé tu Dios están constantemente puestos en ella, desde que comienza el año hasta que termina.
13 Y si vosotros obedecéis puntualmente mis mandamientos, que yo os prescribo hoy, amando a Yahvé vuestro Dios y sirviéndole con todo vuestro corazón y con toda vuestra alma,
14 yo daré a vuestra tierra la lluvia a su tiempo, lluvia de otoño y lluvia de primavera, y tú cosecharás tu trigo, tu mosto y tu aceite;
15 yo daré a tu campo hierba para tu ganado, y comerás y te hartarás.
16 Cuidado, que no se pervierta vuestro corazón y os descarriéis y deis culto a otros dioses, y os postréis ante ellos;
17 pues la ira de Yahvé se encendería contra vosotros y cerraría los cielos: no habría más lluvia, y el suelo no daría su fruto y vosotros desapareceríais bien pronto de esa tierra buena que Yahvé os da.
18
Conclusión.
Poned estas palabras mías en vuestro corazón y en vuestra alma, atadlas como una señal a vuestra mano, y sean como un signo entre vuestros ojos.
19 Enseñádselas a vuestros hijos, hablando de ellas tanto si estás en casa como si vas de camino, así acostado como levantado.
20 Las escribirás en las jambas de tu casa y en tus puertas,
21 para que vuestros días y los días de vuestros hijos en la tierra que Yahvé juró dar a vuestros padres sean tan numerosos como los días del cielo sobre la tierra.
22 Porque, si de verdad guardáis todos estos mandamientos que yo os mando practicar, amando a Yahvé vuestro Dios, siguiendo todos sus caminos y apegándoos a él,
23 Yahvé desalojará delante de vosotros a todas esas naciones, y vosotros desalojaréis a naciones más numerosas y fuertes que vosotros.
24 Todo lugar que sea hollado por la planta de vuestro pie será vuestro; desde el desierto y el Líbano, desde el Río, el río Éufrates, hasta el Mar Occidental, se extenderá vuestra frontera.
25 Nadie podrá resistiros; Yahvé vuestro Dios sembrará el miedo y el pánico ante vosotros sobre todo el territorio que pisen vuestros pies, como él os ha dicho.
26 Mira: Yo pongo hoy ante vosotros bendición y maldición.
27 Bendición, si escucháis los mandamientos de Yahvé vuestro Dios que yo os prescribo hoy.
28 Maldición, si desoís los mandamientos de Yahvé vuestro Dios, si os apartáis del camino que yo os marco hoy, para seguir a otros dioses que no habíais conocido.
29 Cuando Yahvé tu Dios te haya introducido en la tierra a la que vas a entrar para tomarla en posesión, pondrás la bendición sobre el monte Garizín y la maldición sobre el monte Ebal. (
30 ¿No están al otro lado del Jordán, detrás del camino del poniente, en el país de los cananeos que habitan en la Arabá, frente a Guilgal, cerca de la Encina de Moré?)
31 Ya que vais a pasar el Jordán para ir a tomar posesión de la tierra que Yahvé vuestro Dios os da, cuando la poseáis y habitéis en ella,
32 cuidaréis de poner en práctica todos los preceptos y las normas que yo os pongo delante hoy.

Patrocinio

 
 

Introducción a Deuteronomio 

No hay comentario

Fuente: Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros

Patrocinio

Notas

Deuteronomio  11,1
NOTAS

11 Parece que el discurso de Moisés terminaba primeramente con Deu_11:1-17, pero se le añadió una nueva conclusión. Deu_11:18-25. Los vv. Deu_11:26-32 unen este discurso con el Código Deuteronómico, ver Deu_4:44+.


Deuteronomio  11,3
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Éxo 7-15

Deuteronomio  11,5
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Núm 16

Deuteronomio  11,10
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Deu_28:3-5

[2] Deu_8:7-10; Neh_9:2 s

NOTAS

11:10 Alusión probable a una rueda hidráulica movida con el pie.

Deuteronomio  11,13
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Lev_26:3-13

[2] Jer_5:24

Deuteronomio  11,14
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Joe_2:19; Joe_2:23 s

NOTAS

11:14 En Deu_11:14-15 el texto pasa bruscamente a un discurso directo de Dios, ver Deu_7:4; Deu_17:3; Deu_28:20.

Deuteronomio  11,18
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Deu_6:6-9

[2] Mat_23:5 p

Deuteronomio  11,20
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Pro_3:2; Neh_9:29

Deuteronomio  11,23
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Deu_4:38+; Núm_31:1+

Deuteronomio  11,24
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Jos_1:3-5

Deuteronomio  11,26
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Deu 27-28; Deu_30:15-20

Deuteronomio  11,29
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Jos_8:33+

Deuteronomio  11,30
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Jos_4:19+

NOTAS

11:30 Deu_11:30 es una glosa en la que la frase «en el país de los cananeos que habitan en la Arabá, frente a Guilgal» aplica al Guilgal próximo a Jericó, Jos_4:19+, un texto que se refiere a la región de Siquén, donde se halla la encina de Moré, Gén_12:6.