Joel
El texto bíblico no proporciona ninguna información sobre la persona y la vida de JOEL, cuyo nombre significa "El Señor es Dios". Tampoco ofrece datos precisos para determinar la fecha en que el profeta consignó por escrito su mensaje, si bien todo parece indicar que fue después del exilio, hacia el 400 a. C., cuando el Templo ya había sido restaurado. El libro de Joel ocupa un puesto relevante en la literatura hebrea por el vuelo poético de su lenguaje y el vigor de sus imágenes.
La predicación de Joel tiene un trasfondo marcadamente litúrgico. Él manifiesta un especial conocimiento del culto y le atribuye una gran importancia, lo mismo que Ageo y Zacarías. A raíz de esto, se suele afirmar con razón que Joel era un profeta dedicado al servicio del Templo y que sus oráculos -al menos en parte- son una profecía "cultual", es decir, un mensaje profético proclamado en el marco de una asamblea litúrgica. Sin embargo, no hay nada en el Libro que pueda ser tachado de ritualismo. En él no se encuentran prescripciones minuciosas relativas al culto, tan frecuentes en Ezequiel, y ni siquiera reproches por los abusos cometidos en la celebración de los ritos, como los que deplora Malaquías. Lo que más preocupa a Joel es la conversión interior: "Desgarren su corazón y no sus vestiduras, y vuelvan al Señor, su Dios" (2. 13). Por eso su predicación ha encontrado un eco profundo en la liturgia penitencial de la Iglesia.
Joel 2,1-32
2. Ver Sof_1:14-18.
3. Ver Gen_2:8-9; Isa_51:3; Eze_36:35.
4-5. Ver Apo_9:7-9.
6. Ver Nah_2:11.
10. Las tinieblas y los cataclismos cósmicos pertenecen al repertorio tradicional de imágenes con que los escritos proféticos y apocalípticos describen el Día del Señor (3. 3-4; 4. 15-16; Isa_13:9-13; Eze_32:7-8; Amo_8:9; Sof_1:14-18; Mat_24:29; Apo_6:12-14).
15. Ver Num_10:1-10.
17. El "vestíbulo" era la primera de las tres partes en que estaba dividido el Templo de Jerusalén ( 1Re_6:3). El "altar" aquí mencionado era el de los holocaustos, situado en el atrio del Templo. Ver Eze_8:16; Mat_23:35; Luc_11:51.
18. Los "celos" del Señor derivan del amor apasionado que él siente por su Pueblo y que exige como respuesta un amor exclusivo. A causa de estos celos, él no tolera la rivalidad de otros dioses y castiga con severidad las "prostituciones" de Israel ( Eze_5:13; Eze_16:38), pero también acude en su auxilio cuando este se ve amenazado por las naciones extranjeras ( Isa_37:32; Eze_36:5; Zac_1:14; Zac_8:2). Ver nota Exo_20:5.
20. Del "Norte" llegaban ordinariamente los ejércitos que invadían Palestina, en particular los asirios y los babilonios. Por eso, la expresión "el que viene del Norte" pasó a ser sinónimo de cualquier clase de invasión ( Jer_1:14; Eze_38:6). El "mar oriental" es el Mar Muerto; el "occidental", el Mediterráneo ( Zac_14:8).
23. La "lluvia de otoño" es la de octubre-novíembre, poco antes de comenzar la siembra. La "de primavera" es la de marzo-abril, cuando las cosechas están madurando. Ver Stg_5:7.
25. Ver nota 1. 4.