11:32 Las pruebas enviadas por el Señor son juicios que preludian el último juicio. Pero su finalidad es la conversión que evitará la condenación final (v. 32). Se habrían evitado estos castigos si los culpables -con ocasión de la comunión con el cuerpo de Cristo (v. 31)- se hubieran examinado a sí mismos y se hubieran corregido.