1Sa 15,7-9

Batió Saúl a los amalecitas desde Javilá, en dirección de Sur, frente a Egipto. Capturó vivo a Agag, rey de los amalecitas, y pasó a todo el pueblo a filo de espada en cumplimiento del anatema. Pero Saúl y la tropa perdonaron a Agag y a lo más escogido del ganado mayor y menor, las reses cebadas y los corderos y todo lo bueno. No quisieron consagrarlo al anatema. Sólo consagraron al anatema toda la hacienda vil y sin valor.

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


NOTAS

15:9 El anatema es la ofrenda hecha a Yahvé de todo el botín cobrado por la victoria. Pero Saúl y el pueblo incumplieron el anatema que debía alcanzar a todos los seres vivos. Ofrecer lo mejor del botín en sacrificio (1Sa_15:15) no responde a la prescripción. Saúl ha obrado sin tomar en serio la orden de Yahvé, y ése es el drama: su falta consiste en haber elegido, por complacer al pueblo, una manera distinta de honrar a Yahvé. Entre Yahvé, que le ha elegido, y el pueblo, que le ha aclamado y reconocido, Saúl ha buscado un compromiso, sin decidirse exclusivamente por Yahvé.
I Samuel 15, 9

Patrocinio