1Sa 2,22-36


Nuevos datos sobre los hijos de Elí.
Elí era muy anciano. Cuando se enteró de todo cuanto sus hijos hacían a todo Israel, y de que se acostaban con las mujeres que servían a la entrada de la Tienda del Encuentro, les dijo: «¿Por qué hacéis estas villanías que yo mismo he oído comentar a todo el pueblo? No, hijos míos, los rumores que oigo no son buenos... Si un hombre peca contra otro hombre, Dios será el árbitro; pero si el hombre peca contra Yahvé, ¿quién intercederá por él?» Pero ellos no escucharon la voz de su padre, porque Yahvé deseaba hacerles morir.
Cuanto al niño Samuel, iba creciendo y haciéndose grato tanto a Yahvé como a los hombres.

Anuncio del castigo.
Vino un hombre de Dios a Elí y le dijo: «Así ha dicho Yahvé. Claramente me he revelado a la casa de tu padre, cuando ellos estaban en Egipto al servicio de la casa del faraón. Y lo elegí entre todas las tribus de Israel para ser mi sacerdote, para subir a mi altar, incensar la ofrenda y llevar el efod en mi presencia, y he concedido a la casa de tu padre parte en todos los sacrificios por el fuego de los hijos de Israel. ¿Por qué pisoteáis el sacrificio y la oblación que yo dispuse en la Morada, y por qué honras a tus hijos más que a mí, cebándoos con lo mejor de todas las oblaciones de mi pueblo Israel? Por eso —palabra de Yahvé, Dios de Israel— yo había dicho que tu casa y la casa de tu padre andarían siempre en mi presencia, pero ahora —palabra de Yahvé— me guardaré bien de ello. Porque a los que me honran, yo los honro, pero los que me desprecian son despreciados. He aquí que vienen días en que amputaré tu brazo y el brazo de la casa de tu padre, de suerte que en tu casa los hombres no lleguen a madurar. Mirarás como enemigo la Morada y todo el bien que yo haré a Israel, y nunca habrá hombres maduros en tu casa. Conservaré a alguno de los tuyos cabe mi altar para que sus ojos se consuman y tu alma se marchite, pero la mayor parte de los tuyos perecerá por la espada de los hombres. Será para ti señal lo que va a suceder a tus dos hijos Jofní y Pinjás: en el mismo día morirán los dos. Yo me suscitaré un sacerdote fiel, que obre según mi corazón y mis deseos, le edificaré una casa permanente y caminará siempre en presencia de mi ungido. El que quedare de tu casa vendrá a postrarse ante él para conseguir algún dinero o una hogaza de pan y dirá: “Destíname, por favor, a una función sacerdotal cualquiera, para que tenga un bocado de pan que comer.”»

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


NOTAS

2:23 (a) Este segundo reproche, que falta en griego, toma una expresión de Éxo_38:8 y añade nuevas sombras al sacerdocio de Siló.

2:23 (b) La precisión «estas villanías», que parece una glosa, es propia del hebreo, que emite así un juicio sobre los hijos de Elí.
I Samuel 2, 23

NOTAS

2:24 Final del v. corrompido; hebr. «ofendiendo al pueblo de Yahvé».
I Samuel 2, 24

NOTAS

2:25 Como en otros pasajes de la Biblia, Éxo_4:21; Jos_11:20; Isa_6:9-10, etc., el endurecimiento del pecador es atribuido a Yahvé como causa primera. Pero se trata de un modo de hablar semítico, que de ninguna manera pretende negar la libertad humana.
I Samuel 2, 25

REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Sir_46:13; Luc_2:52
I Samuel 2, 26

REFERENCIAS CRUZADAS

[1] 1Sa_3:11-14

NOTAS

2:27 (a) Este episodio es una inserción tardía que repite la idea de 1Sa_3:11-14. La muerte de Jofní y Pinjás, 1Sa_4:11, no será más que la «señal», 1Sa_2:34, de las futuras desgracias anunciadas en 1Sa_2:33 : matanza de los sacerdotes de Nob, descendientes de Elí, 1Sa_22:18-19, excepto Abiatar, 1Sa_22:22-23, que será destituido por Salomón, 1Re_2:27; en 1Sa_2:35 : sustitución por la familia de Sadoc, que a partir de Salomón contará con el favor del rey, «el ungido del Señor»; pero 1Sa_2:36 no corresponde a la situación descrita en 2Re_23:9, y la composición podría ser anterior al reinado de Josías.

2:27 (b) Se alude aquí a Leví como antepasado del sacerdocio.
I Samuel 2, 27

NOTAS

2:28 Este efod no es un vestido que se ciñe, como el de 1Sa_2:18, sino un objeto que «se lleva», que se puede «acercar», 1Sa_14:3; 1Sa_23:6; 1Sa_30:7, y que contiene las suertes sagradas mediante las cuales se consulta a Yahvé, 1Sa_14:18 s; 1Sa_23:9 s; 1Sa_30:8, ver 1Sa_14:41+. Aparece en la época de los Jueces, Jue_17:5; Jue_18:14 s (el efod de Gedeón será condenado como símbolo idolátrico) y no vuelve a mencionarse en los relatos posteriores a David (una alusión en Ose_3:4).
I Samuel 2, 28

NOTAS

2:29 Término sin preposición en hebreo, que parece ser una designación poética del santuario de Jerusalén, ver Sal_26:8; Sal_68:6 [Sal_68:5].
I Samuel 2, 29

REFERENCIAS CRUZADAS

[1] 2Sa_22:26; Sal_18:26 [Sal_18:25]

NOTAS

2:30 La promesa de Yahvé se ve aquí cuestionada por el pecado de los sacerdotes de Siló.
I Samuel 2, 30

REFERENCIAS CRUZADAS

[1] 1Sa_22:18-19; 1Sa_14:10+
I Samuel 2, 33

REFERENCIAS CRUZADAS

[1] 1Sa_4:11
I Samuel 2, 35

REFERENCIAS CRUZADAS

[1] 1Sa_9:26+
I Samuel 2, 36

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