“
Pero vosotros, hermanos, no vivís en la oscuridad, para que ese día os sorprenda como ladrón, pues todos vosotros sois hijos de la luz e hijos del día. Nosotros no somos de la noche ni de las tinieblas. ”
5:4 La mención del día (sin más, 1Co_1:8+) facilita el cambio de sentido. La luz y el día, el estado de vigilia, se oponen a las tinieblas y a la noche, al sueño (que ya no es la muerte como en 1Ts_4:13). Asimismo, los «hijos de la luz», los cristianos, se oponen a los «hijos de las tinieblas». Ver Jua_8:12+; Flp_2:15.