2Cr 34,3-7


Primeras reformas.
El año octavo de su reinado, siendo todavía joven, comenzó a buscar al Dios de su padre David; y en el año doce empezó a purificar a Judá y a Jerusalén de los santuarios, de los cipos, de las estatuas y de los ídolos fundidos. Derribaron en su presencia los altares de los Baales, hizo arrancar los altares de aromas que había sobre ellos, y rompió los cipos, las imágenes y los ídolos fundidos reduciéndolos a polvo, que esparció sobre las sepulturas de los que les habían ofrecido sacrificios. Quemó los huesos de los sacerdotes sobre los altares y purificó a Judá y Jerusalén. En las ciudades de Manasés, de Efraín y de Simeón, y hasta en Neftalí y en los territorios asolados que las rodeaban, derribó los altares, demolió los cipos y las estatuas y las redujo a polvo, y abatió los altares de aromas en toda la tierra de Israel. Después regresó a Jerusalén.

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


REFERENCIAS CRUZADAS

[1] |2Re_23:4-20

[2] 2Cr_14:1-4 [2Cr_14:2-5]; 2Cr_31:1
II Crónicas  34, 3

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