2Re 6,1-7


El hacha perdida y hallada.
Los discípulos de los profetas dijeron a Eliseo: «Mira, el lugar en el que residimos bajo tu dirección, es demasiado estrecho para nosotros. Iremos al Jordán, tomaremos una viga cada uno y nos construiremos allí un lugar donde habitar.» Él respondió: «Id.» Uno de ellos dijo: «¿Querrás, por favor, venir con tus siervos?» Él respondió: «Sí, iré.» Los acompañó y, al llegar al Jordán, se pusieron a cortar madera. Cuando uno de ellos derribaba un tronco, el hierro del hacha cayó al agua, y gritó: «¡Ay, mi señor, que era prestada!» El hombre de Dios preguntó: «¿Dónde ha caído?» Le indicó el lugar y (Eliseo) cortó un palo, lo tiró hacia allí y sacó el hierro a flote. Dijo: «Súbelo.» Él extendió su mano y lo alcanzó.

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


NOTAS

6:1 Probablemente Guilgal, donde Eliseo residía en medio de los profetas, 1Re_4:38.
II Reyes  6, 1

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