2Ts 3,6-12


Advertencias sobre el desorden.
Hermanos, os mandamos en nombre del Señor Jesucristo que os apartéis de todo hermano que viva desordenadamente y no según la tradición que de nosotros recibisteis. Ya sabéis vosotros cómo debéis imitarnos, pues estando entre vosotros no vivimos desordenadamente, ni comimos de balde el pan de nadie, sino que día y noche con fatiga y cansancio trabajamos para no ser una carga a ninguno de vosotros. No porque no tengamos derecho, sino por daros en nosotros un modelo que imitar. Además, cuando estábamos entre vosotros os mandábamos esto: Si alguno no quiere trabajar, que tampoco coma. Porque nos hemos enterado que hay entre vosotros algunos que viven desordenadamente, sin trabajar nada, pero metiéndose en todo. A ésos les mandamos y les exhortamos en el Señor Jesucristo a que trabajen con sosiego para comer su propio pan.

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


REFERENCIAS CRUZADAS

[1] 1Ts_4:1+

[2] 1Ts_4:11-12; 1Ts_5:14; 2Ts_2:15+
II Tesalonicenses  3, 6

NOTAS

3:7 Imitando a Pablo, 1Co_4:16; Gál_4:12; Flp_3:17, los fieles imitarán a Cristo, 1Ts_1:6; Flp_2:5; ver Mat_16:24; Jua_13:15; 1Pe_2:21; 1Jn_2:6, a quien él imita, 1Co_11:1. Finalmente, deben imitar a Dios, Efe_5:1 (ver Mat_5:48), e imitarse los unos a los otros, 1Ts_1:7; 1Ts_2:14; Heb_6:12. Esta comunidad de vida se apoya en el «modelo» de la doctrina, Rom_6:17, recibido por la «tradición», v. 2Ts_3:6; 1Co_11:2+; 1Ts_2:13+. Los jefes que la trasmiten deben ser ellos mismos «modelos», v. 2Ts_3:9; Flp_3:17; Flp_4:8-9; 1Ti_1:16; 1Ti_4:12; Tit_2:7; 1Pe_5:3, cuya fe y vida se imitan, Heb_13:7.
II Tesalonicenses  3, 7

REFERENCIAS CRUZADAS

[1] 1Co_4:11; 2Co_11:27; Hch_18:3+; 1Ts_2:9

[2] Mat_10:10
II Tesalonicenses  3, 8

NOTAS

3:10 Esta norma, que sólo se refiere a la negativa a trabajar, proviene quizá de una frase de Jesús o simplemente de una máxima popular. Es «la regla de oro del trabajo cristiano».
II Tesalonicenses  3, 10

REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Gén_3:19
II Tesalonicenses  3, 12

Patrocinio