Eze 44,7-9

que habéis cometido introduciendo extranjeros incircuncisos de corazón y de cuerpo para que estuvieran en mi santuario y profanaran mi templo, cuando me ofrecíais mi alimento, grasa y sangre; así habéis roto mi alianza con todas vuestras abominaciones. En lugar de atender al ministerio de mis cosas santas, habéis encargado a otros el ejercicio de mi ministerio en mi santuario, en lugar vuestro. Así dice el Señor Yahvé: Ningún extranjero, incircunciso de corazón y de cuerpo, entrará en mi santuario, ninguno de los extranjeros que viven en medio de los israelitas.

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Jer_4:4+; Gén_17:10+

[2] Eze_22:26

NOTAS

44:7 «habéis roto» versiones; «han roto» hebr.
Ezequiel  44, 7

NOTAS

44:8 Probable alusión al hecho de que se haya empleado, hasta para el servicio del templo, a extranjeros más o menos asimilados, Jos_9:27; Deu_29:10 [Deu_29:11].
Ezequiel  44, 8

REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Hch_21:29-29

NOTAS

44:9 Todavía en tiempos de Jesucristo se leía en el templo de Herodes esta inscripción grabada en griego de la que se han encontrado dos ejemplares: «Ningún extranjero penetre en el interior de la balaustrada y del recinto que rodean el santuario. El que sea sorprendido, a nadie deberá acusar más que a sí mismo de la muerte que será su castigo».
Ezequiel  44, 9

Patrocinio