“ El esplendor de la majestad de Yahvé. Has desechado a tu pueblo, la Casa de Jacob, porque estaban llenos de adivinos y evocadores, como los filisteos, y con extraños chocan la mano; ”
2:6 (a) Este poema, cuya unidad está señalada por la reiteración de las mismas fórmulas (Isa_2:9, Isa_2:11, Isa_2:17 y Isa_2:10, Isa_2:19, Isa_2:21) data del primer período de la actuación de Isaías, cuando Judá completa un largo período de prosperidad, bajo Ozías y Jotán; pero también podía referirse a Samaría, que no había caído aún en la anarquía y la decadencia que pronto conocería. El profeta anuncia una intervención fulgurante de Yahvé.
2:6 (b) Corregimos el «desde antes» hebreo, miqqedem, por «de adivinos», qosemîm, o «de adivinación» miqsam. Esta corrección no tiene el apoyo de las versiones; con todo justifica el «y» puesto delante de «evocadores (de espectros)». -La práctica de la adivinación fue muy amplia en el Oriente antiguo y también lo fue en Israel, 1Sa_28:3 s; Isa_8:19, a pesar de las condenaciones de Éxo_22:17 [Éxo_22:18]; Lev_19:31; Lev_20:27; Deu_18:10-11, Deu_18:14. Nada se sabe acerca de la adivinación entre los filisteos, pero en 1Sa_6:2 se menciona a sus adivinos.
2:6 (c) Dudoso: otros corrigen «y las manos de extranjeros estrechan».