“
Unos serafines se mantenían erguidos por encima de él; cada uno tenía seis alas: con un par se cubrían la faz, con otro par se cubrían los pies, y con el otro par aleteaban. ”
6:2 (a) Etimológicamente, los «Ardientes». Estos seres alados sólo el nombre tienen de común con las serpientes abrasadoras de Núm_21:6; ver 8; Deu_8:15, o con el dragón volador de Isa_14:29; Isa_30:6. Son figuras humanas, pero provistas de seis alas, que recuerdan a los seres misteriosos que tiran del carro de Yahvé en Ez 1, y a las que Ez 10 llama «querubines», como las figuras análogas ligadas al arca, Éxo_25:18+. La tradición posterior dio el nombre de Serafines y Querubines a dos clases de Ángeles.