Jer 5,22-24
“
¿A mí no me temeréis? —oráculo de Yahvé—,
¿delante de mí no temblaréis,
que puse la playa por término al mar,
frontera que jamás traspasará?
Se agitará, mas no lo logrará;
mugirán sus olas, pero no pasarán.
Pero este pueblo tiene
un corazón traidor y rebelde:
traicionaron llegando hasta el fin.
Y no se les ocurrió decir:
«Ea, temamos a Yahvé nuestro Dios,
que da la lluvia temprana
y la tardía a su tiempo;
el que nos asegura las semanas
que gobiernan la mies.»
”
¿delante de mí no temblaréis,
que puse la playa por término al mar,
frontera que jamás traspasará?
Se agitará, mas no lo logrará;
mugirán sus olas, pero no pasarán.
Pero este pueblo tiene
un corazón traidor y rebelde:
traicionaron llegando hasta el fin.
Y no se les ocurrió decir:
«Ea, temamos a Yahvé nuestro Dios,
que da la lluvia temprana
y la tardía a su tiempo;
el que nos asegura las semanas
que gobiernan la mies.»
”