Luc 19,15-26

«Cuando regresó, después de recibir la investidura real, mandó llamar a aquellos siervos suyos a los que había dado el dinero, para saber lo que había ganado cada uno. Se presentó el primero y dijo: “Señor, tu mina ha producido diez minas.” Le respondió: “¡Muy bien, siervo bueno!; ya que has sido fiel en lo insignificante, toma el gobierno de diez ciudades.” Vino el segundo y dijo: “Tu mina, Señor, ha producido cinco minas.” Dijo a éste: “Ponte tú también al mando de cinco ciudades.” «Vino el otro y dijo: “Señor, aquí tienes tu mina, que he tenido guardada en un lienzo; pues tenía miedo de tí, que eres un hombre severo; que tomas lo que no pusiste y cosechas lo que no sembraste.” Dícele: “Por tu propia boca te juzgo, siervo malo; sabías que yo soy un hombre severo, que tomo lo que no puse y cosecho lo que no sembré; pues, ¿por qué no colocaste mi dinero en el banco? Y así, al volver yo, lo habría cobrado con los intereses.” Y dijo a los presentes: “Quitadle la mina y dádsela al que tiene las diez minas.” Dijéronle: “Señor, tiene ya diez minas.” —“Os digo que a todo el que tiene, se le dará; pero al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará.”

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Luc_20:16
Lucas 19, 24

REFERENCIAS CRUZADAS

[1] |Mat_13:12; |Mar_4:25; = Luc_8:18
Lucas 19, 26

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