N& . amp . amp . uacute . m 21,27-30
“
Por eso dicen los trovadores:
«¡Venid a Jesbón,
que sea construida, fortificada,
la ciudad de Sijón!
Porque fuego ha salido de Jesbón,
una llama de la ciudad de Sijón:
ha devorado Ar Moab,
ha tragado las alturas del Arnón.
¡Ay de ti, Moab!,
perdido estás, pueblo de Camós.
Ha entregado sus hijos a la fuga
y sus hijas al cautiverio,
en manos de Sijón, el rey amorreo.
Su posteridad ha perecido,
desde Jesbón hasta Dibón,
y hemos dado fuego
desde Nofaj hasta Mádaba.»
”
«¡Venid a Jesbón,
que sea construida, fortificada,
la ciudad de Sijón!
Porque fuego ha salido de Jesbón,
una llama de la ciudad de Sijón:
ha devorado Ar Moab,
ha tragado las alturas del Arnón.
¡Ay de ti, Moab!,
perdido estás, pueblo de Camós.
Ha entregado sus hijos a la fuga
y sus hijas al cautiverio,
en manos de Sijón, el rey amorreo.
Su posteridad ha perecido,
desde Jesbón hasta Dibón,
y hemos dado fuego
desde Nofaj hasta Mádaba.»
”