Rom 7,7-13


B. EL HOMBRE PECADOR FUERA DE CRISTO
Función de la ley en el pasado.
¿Qué decir, entonces? ¿Que la ley es pecado? ¡De ningún modo! Sin embargo yo no conocí el pecado sino por la ley. De suerte que yo hubiera ignorado la concupiscencia si la ley no dijera: ¡No te des a la concupiscencia! Mas el pecado, aprovechándose del precepto, suscitó en mí toda suerte de concupiscencias; pues sin ley el pecado estaba muerto. ¡Vivía yo un tiempo sin ley!, pero en cuanto sobrevino el precepto, revivió el pecado, y yo morí; y resultó que el precepto, dado para vida, me causó muerte. Porque el pecado, aprovechándose del precepto, me sedujo, y por él, me dio muerte. Así que, la ley es santa, y santo el precepto, y justo y bueno. Luego ¿se ha convertido lo bueno en muerte para mí? ¡De ningún modo! Sino que el pecado, para aparecer como tal, se sirvió de una cosa buena, para procurarme la muerte, a fin de que el pecado ejerciera todo su poder de pecado por medio del precepto.

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Éxo_20:17; Stg_1:14-15

NOTAS

7:7 La ley en sí es buena y santa en cuanto que expresa la voluntad de Dios, Rom_7:12-25; 1Ti_1:8; representa un glorioso patrimonio de Israel, Rom_9:4; pero ver Rom_2:14. Y, con todo, parece haber fracasado: no sólo los judíos son pecadores, como los demás, a pesar de su Ley, Rom_2:21-27; Gál_6:13; Efe_2:3; sino que hasta sacan de ella una confianza en sus obras, Rom_2:17-20; Rom_3:27; Rom_4:2; Rom_4:4; Rom_9:31; Flp_3:9; Efe_2:8, que les cierra a la gracia de Cristo, Gál_6:12; Flp_3:18; ver Hch_15:1; Hch_18:13; Hch_21:21. En una palabra, la Ley es incapaz de conferir la justicia, Gál_3:11, Gál_3:21 s; Rom_3:20; ver Heb_7:19. Con una dialéctica, que en la polémica adquiere un giro paradójico, Pablo explica este fracaso aparente por la misma naturaleza de la Ley y por su función en la historia de la salvación. La ley (mosaica, pero también toda ley incluso el «precepto» dado a Adán, ver vv. Rom_7:9-11), luz que ilumina el espíritu sin darle fuerza interior, es impotente para conseguir se evite el pecado; más bien le favorece. Sin ser ella misma fuente de pecado, se convierte en su instrumento excitando la concupiscencia, Rom_7:7; por el conocimiento que da al espíritu agrava la falta convirtiéndola en una «transgresión», Rom_4:15; Rom_5:13; finalmente, no proporciona otro remedio que un castigo de ira, Rom_4:15, de maldición, Gál_3:10, de condenación 2Co_3:9, y de muerte, 2Co_3:6, hasta el punto que puede ser llamada la «ley del pecado y de la muerte», Rom_8:2; ver 1Co_15:56; Rom_7:13. Si a pesar de todo Dios ha querido este sistema imperfecto, ha sido como un régimen transitorio de pedagogo, Gál_3:24, para dar al hombre la conciencia de su pecado, Rom_3:19; Rom_5:20; Gál_3:19, y conseguir de él que sólo espere su justicia de la gracia de Dios, Gál_3:22; Rom_11:32. Como régimen transitorio, debe desaparecer para ser sustituido por el cumplimiento de la Promesa hecha anteriormente a Abrahán y a su descendencia, Gál_3:6-22; Rom 4. Cristo ha puesto fin a la Ley, Efe_2:15; ver Rom_10:4, «dando cumplimiento», ver Mat_3:15; Mat_5:17, en todo lo que tiene de positivo, Rom_3:31; Rom_9:31, en especial con su muerte, expresión suprema de su amor, Rom_5:8; Rom_8:35; Rom_8:39; Gál_2:20; Flp_2:5-8; con ello satisfacía las exigencias de la Ley en relación con los pecadores con quienes quiso solidarizarse, Gál_3:13+; Rom_8:3+; Col_2:14. Libra a los hijos de la tutela del pedagogo, Gál_3:25. Con él han muerto a la Ley, Gál_2:19; Rom_7:4-6; ver Col_2:20, de la cual les ha «rescatado», Gál_3:13, para hacer de ellos hijos adoptivos, Gál_4:5. Por el Espíritu de la Promesa, da al hombre nuevo, Efe_2:15+, la fuerza interior para realizar el bien que la ley ordenaba, Rom_8:4. Este régimen de la gracia que sustituye al de la Ley antigua puede también ser llamado ley, pero es la «ley de la fe», Rom_3:27, la «ley de Cristo», Gál_6:2, la «ley del Espíritu», Rom_8:2, cuyo compendio total es el amor, Gál_5:14; Rom_13:8-10; ver Stg_2:8; Jua_13:34, participación del amor del Padre y del Hijo, Gál_4:6; Rom_5:5+.
Romanos  7, 7

REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Rom_4:15; Rom_5:13; 1Co_15:56
Romanos  7, 8

REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Gén_2:17; Gén_3:1 s

NOTAS

7:9 Situándose en el desarrollo de la historia de la salvación, Pablo habla aquí de la humanidad antes del régimen de la Ley, ver Rom_5:13.
Romanos  7, 9

REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Lev_18:5; Eze_20:11
Romanos  7, 10

REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Gén_3:13
Romanos  7, 11

REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Deu_4:8
Romanos  7, 12

REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Rom_5:20

NOTAS

7:13 El pecado personificado, ver Rom_5:12, sustituye a la serpiente de Gén_3:1 y al diablo de Sab_2:24.
Romanos  7, 13

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