Sal 16,10-11

pues no me abandonarás al Seol,
no dejarás a tu amigo ver la fosa.
Me enseñarás el camino de la vida,
me hartarás de gozo en tu presencia,
de dicha perpetua a tu derecha.

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


NOTAS

16:10 El salmista ha elegido a Yahvé. El realismo de su fe y las exigencias de su vida mística piden una intimidad indisoluble con él: necesita, pues, escapar a la muerte que le separaría de él, Sal_6:6 [Sal_6:5], ver Sal_49:16+ [Sal_49:15]. Esperanza imprecisa aún, que preludia la fe en la resurrección, Dan_12:2; 2Ma_7:9+. Las versiones traducen «fosa» por «corrupción». La aplicación mesiánica, admitida por el Judaísmo, se ha verificado en la resurrección de Cristo.
Salmos 16, 10

Patrocinio