Sal 45,2-9
“
Un bello tema bulle en mi corazón;
voy a recitar mi poema para un rey:
mi lengua es pluma de ágil escriba.
Eres la más hermosa de las personas,
la gracia se derrama por tus labios,
por eso Dios te bendice para siempre.
Ciñe tu espada al costado, valiente,
es tu gloria y tu esplendor; marcha, cabalga,
en pro de la verdad, la piedad y la justicia;
que tu diestra te enseñe a hacer proezas.
Agudas son tus flechas, sometes a los pueblos,
pierden el coraje los enemigos del rey.
Tu trono es eterno, como el de Dios;
un cetro de equidad es tu cetro real.
Amas la justicia y odias la iniquidad,
por eso Dios, tu Dios, te ha ungido
con óleo de fiesta más que a tus compañeros.
A mirra, áloe y acacia huelen tus vestidos,
desde salones de marfil arpas te recrean.
”
voy a recitar mi poema para un rey:
mi lengua es pluma de ágil escriba.
Eres la más hermosa de las personas,
la gracia se derrama por tus labios,
por eso Dios te bendice para siempre.
Ciñe tu espada al costado, valiente,
es tu gloria y tu esplendor; marcha, cabalga,
en pro de la verdad, la piedad y la justicia;
que tu diestra te enseñe a hacer proezas.
Agudas son tus flechas, sometes a los pueblos,
pierden el coraje los enemigos del rey.
Tu trono es eterno, como el de Dios;
un cetro de equidad es tu cetro real.
Amas la justicia y odias la iniquidad,
por eso Dios, tu Dios, te ha ungido
con óleo de fiesta más que a tus compañeros.
A mirra, áloe y acacia huelen tus vestidos,
desde salones de marfil arpas te recrean.
”